Mis padres, muy serios, me han
sentado frente a ellos para explicarme lo que es la crisis. Es la causante de
que mamá no vaya tanto de tiendas y de que este verano no tengamos vacaciones en la playa. Dicen que no afecta a todos por igual. Por ejemplo, mi amiga
María no la tiene porque su madre es jefa, y los jefes casi no tienen crisis.
Yo creo que
no es tan mala pues desde que la tenemos papá pasa mucho tiempo conmigo y me acompaña al colegio todos los días.
En La colina naranja, vuelve la primavera de Microrrelatos Indignados. Esta es mi aportación.
En La colina naranja, vuelve la primavera de Microrrelatos Indignados. Esta es mi aportación.
Alguna maldita ventaja tiene que tener la cosa: más tiempo para los tuyos, compartir, calor humano, solidaridad, poner cada cual lo poco que tiene,... esto es que lo que vamos a ganar, lo que nadie nos puede quitar.
ResponderEliminarDesde la mirada de los niños la situación puede ser ventajosa, pienso en mi sobrina, también su papá puede recogerla y llevarla al cole, ella va la mar de orgullosa, ya vés.
ResponderEliminarUn abrazo Yolanda, estupenda historia.
La inocencia de los niños -y los borrachos- a veces nos regala esa ternura que le falta a este mundo cansado. Muy buena tu mirada.
ResponderEliminarJuan M
Yolanda, la inocencia infantil que logra extraernos una sonrisa. No hay mal que por bien no venga. Aunque claro, es duro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Dicen que las crisis son el detonante de un cambio, y por qué no de un tiempo mejor. Es mejor verlo así, buscar, como esa niña, lo positivo del asunto.
ResponderEliminarBesos.
Una cierta brisa fresca con la visión inocente de la nena. Por lo menos alguien sale beneficiado de lo que está cayendo.
ResponderEliminarSaludos
Busqué la visión infantil sacada de una realidad que ha ido creciendo, lo he observado al recoger a mí hijo en el colegio, antes no se veían tantos padres esperand. Los niños no tienen por qué verse salpicado por la parte negativa de esta realidad, así pues, que disfruten del otro lado de la moneda.
ResponderEliminarGracias amig@s por vuestra visita y comentarios.
Esa visión infantil que todo lo explica según su mundo y sus necesidades inmediatas (me encanta). Un relato tierno lleno de tristeza adulta.
ResponderEliminarUn abrazooo, Yolanda.
Amparo
Ojalá todos miráramos con los ojso de los niños, que son capaces de ver las cosas buenas de la vida y apreciarlaS. Los mayores nos pasamos la vida lamentándonos y no poniendo remedio a lo que puede tenerlo o por lo menos, valorando lo que merece la pena. Me ha gustado mucho tu indignado.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Feliz visión de la crisis, la de quien sabe convertirla en oportunidad: para estar más con los hijos, para disfrutar de placeres más sencillos, para trasladar a los niños la necesidad de ser más austeros...Un beso
ResponderEliminarLo más doloroso de este robo que llaman crisis, es que son los más débiles los más perjudicados.
ResponderEliminarBesos muy indignados.
Amig@s, acabo de cambiar la línea en la que decía que la madre de la amiga de la niña no estaba afectada por la crisis al ser "directora de un organismo", lo he adaptado al lenguaje infantil de la niña que es la narradora.
ResponderEliminarGracias a cuantos seguís pasando por aquí a leer y comentar.
Hola Yolanda, poco a poco os voy descubriendo por esto mundos de la re, aunque tu me has dejado una pista bastante buena.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu micro con esa mirada a través del prisma de la niña. Ellos a todo le ven el lado bueno, afortunadamente.
Un abrazo y hasta la próxima.
Soy Juancho Plaza, que tenía cerrado el correo...
EliminarOtro abrazo que no cuestan dinero y alargan la vida.
Si te apetece compartir tus micros, echa una ojeada a ésto.
ResponderEliminarhttp://280ypunto.blogspot.com.es/
Un saludo.
Si tan tiernas nos parecen las miradas de los niños, por qué nos empeñamos en imponer siempre nuestra visión adulta????.
ResponderEliminarUn placer visitar tu casa, como siempre
Yolanda: gracias por tus palabras en mi blog. Es otra cosa buena que tienen las letras, que nos hacen encontrar en el camino otros viajeros que llevan en la maleta historias por contar, como nosotros. Me ha encantado leer las historias de tu blog, cuéntame desde ya entre tus seguidores.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo desde León.
Beatriz