CAER EN LA RED
Al principio solo colgabas
videos inocentes: de nuestra boda, la luna de miel… No me gustaba pero
consentía, aunque más tarde me negué a que nuestra hija apareciese en la red
antes que en casa. Suplicaste y cedí, nuestra pequeña era tan bonita que no
tenía nada de malo mostrarla y compartir su belleza y simpatía con unos cuantos
amigos, aunque fuesen virtuales. Pero no pudiste parar. Accidentalmente
encontré las cámaras ocultas en casa, supe que nuestra vida era pública. Me
perdiste pero eres feliz, porque el video con la bronca que te monté cuando lo
descubrí ya es viral.
Este relato ha resultado ganador semanal en el "concurso de las 100 palabras justas", siempre es un gusto hacerse un hueco en un espacio tan apreciado. Para escuchar el relato y leer los finalistas pinchad aquí
¡Enhorabuena! Me gusta por ser distinto.
ResponderEliminarGracias maestro!
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