NEGACIÓN
No
quedé con mis amigos. No cogí el coche. No pasé delante de un colegio. El niño
no soltó la mano de su madre para correr detrás de su pelota... Pero hay un
diario abierto por la página de las esquelas, y bien entrada la noche estoy frente a él con la vista posada en la de un niño de seis años.
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EL ÁNGEL
El
ángel llega bien entrada la noche. Es
muy silencioso. Se mete debajo de mis sábanas y me susurra palabras que no
entiendo. No huele a
flores y el tacto de su piel no es suave, como aseguró mamá.
Con estos dos micros he participado (sin éxito), en el concurso semanal de Radio Castellón, la frase obligatoria era: "bien entrada la noche".
Pues son muy buenos, Yolanda, muy inquietantes....
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ResponderEliminarSólo el hecho de participar es un buen aliciente para poner en march la imaginación El segundo, sobre todo, me parece inquietante... Dice tanto en tan poco...
Los dos son estupendos, consigues narrar más con lo que callas que con lo que cuentas y eso es mucho en un micro.
ResponderEliminarYolanda, dos microrrelatos inquietantes que abren a la imaginación del lector ir más allá o quedase más acá. Comparten los dos ese estremecimiento que se insinúa.
ResponderEliminarUn abrazo.
Vaya, Yolanda, no sé qué escalofrío me ha dado, pero, caramba, qué buen momento de pensar...
ResponderEliminarUn saludo
Juan M.
juanmanuelsanchezmoreno.blogspot.com
Me gustan los dos, pero me quedaría, si se trata de escoger, con el segundo, aunque el tema esté mucho más visto que el otro.
ResponderEliminarDe todas formas, causan efecto ambos. Son inquietantes.
Un saludo.
Muy efectistas los dos. Crean angustia y están bien hechos. ¿Tienes que elegir o simplemente decidiste escribir dos bajo una misma premisa?
ResponderEliminarEnvié dos, no hay que elegir.
EliminarGracias a todos por acercaros.
Fuerte abrazo.
Sugieren mucho con pocas palabras, que es de lo que se trata. Seguro que no desmerecen del premiado.
ResponderEliminarEl éxito es caprichoso, tus relatos no... Me gustan mucho Yolanda. Un abrazo
ResponderEliminarMe gusta mucho el primero, insistimos en negar nuestros errores incluso ante una evidencia. El diario con la esquela golpea al lector.
ResponderEliminarEl segundo me gusta menos, quizá porque es un tema que lo he visto retratado demasiadas veces, aunque el tratamiento que haces de él es muy bueno, y la última frase (muy lograda por el contraste brusco ángel-realidad) nos plantea la duda de la connivencia de la madre.
abrazos
Tremendamente impactantes los dos y los dos me han estremecido Yolanda Nava, felicidades, creo que en alguno de los dos tienes premio seguro.
ResponderEliminarAmbos con contundentes -en cuanto al impacto que producen en el lector- y perturbadores, Yolanda. Muy, muy buenos.
ResponderEliminarUn abrazo,
Amig@s muchas gracias por acercaros y comentar.
ResponderEliminarFuerte abrazo.
Me gustaron mucho, sobre todo el de ese ángel deleznable.
ResponderEliminarTriple de abrazos.